Académica destaca que es fundamental que los escolares puedan valorar el aprendizaje autónomo

La interacción, subrayó, es un aspecto relevante y fundamental para poder trabajar con los escolares. “Que no sea el profesor solamente el que hable, porque eso desmotiva a los estudiantes en estos tiempos”, destacó.

El proceso de enseñanza frente a la pantalla, durante el confinamiento por coronavirus, ha sido todo un desafío para profesores, estudiantes y padres. Y a pesar de los inconvenientes, ya sea de conexión u otros aspectos que conllevan una educación online, existen ciertos mecanismos que se pueden utilizar para un aprendizaje efectivo y para sacarle el máximo de provecho a la adquisición de nuevos conocimientos durante este periodo.

Al respecto, Koritza Subero, académica conferenciante de la Escuela de Pedagogías en Inglés de la Facultad de Ciencias de la Educación de la Universidad de Talca, entregó algunas recomendaciones para hacer más útil el proceso, considerando que en los patrones tradicionales hay marcadores como la interacción y el feedback entre los estudiantes y los profesores.

El uso de las tecnologías, dijo, entrega la posibilidad a los alumnos de permitir que puedan investigar y que ya no sea el profesor quien tiene todos los conocimientos.

“Es importante que los estudiantes puedan valorar el aprendizaje autónomo y una de las estrategias más marcadas en esa línea es el aula invertida, en donde tengan que investigar sobre un tema, asumir un rol como si fuesen ellos los docentes y solucionar problemas durante la implementación de esta técnica”, explicó la profesora, quien tiene maestría sobre el Uso de Tecnologías y Comunicación para la enseñanza- aprendizaje.

Para concretar este tipo de trabajo, el docente debe ser un guía para el alumno y es importante que le entregue al alumno una pauta de facilitación logística, marcar reglas, herramientas, etcétera.

La interacción, subrayó, es un aspecto relevante y fundamental para poder trabajar con los escolares. “Que no sea el profesor solamente el que hable, porque eso desmotiva a los estudiantes en estos tiempos”, destacó.

“Si la tecnología se utiliza de manera integrada para hacer que el estudiante desarrolle su autonomía es positivo su uso, hay limitaciones pero deben ser abordadas para que la entrega del conocimiento sea provechosa”, añadió la académica.